Los anticondensación están diseñados para la calefacción de ambientes pequeños, con un volumen inferior a 20 m3, en los que se desea evitar la formación de condensación en su interior.

Están diseñados para funcionar en aire estático y tienen una potencia específica reducida, de modo que la temperatura superficial de los elementos calefactores está limitada incluso en presencia de la única convección natural, haciendo superflua la presencia de un sistema de control (calentadores autolimitantes). El usuario controlará la temperatura ambiente y apagará el calentador al alcanzar la temperatura deseada. Para los calentadores sumergidos en una atmósfera potencialmente explosiva, el valor de la temperatura ambiente máxima se indica en la placa y nunca debe superarse.

La carcasa de contactos eléctricos puede ser a prueba de explosiones Ex-d o de seguridad aumentada Ex-e.

Las certificaciones disponibles para áreas seguras son CE, IEC, EAC y con elementos calefactados certificados por UL-Recognized; mientras que para su uso en áreas explosivas ATEX, IECEx, EAC, UK CA e INMETRO.